El kaiku se usaba para ordeñar las ovejas, cabras y las vacas y los más pequeños para hacer y servir la cuajada, esto hasta mediados del siglo XX. Luego, con la aparición del plástico y del metal, se cambiaron los recipientes de madera por estos otros, aunque respetando la forma, y para la cuajada, se empezaron a usar unos kaikus hechos de cerámica.
Hoy en día, el uso que se le da al kaiku es sobre todo decorativo, por la dificultad para limpiarlo y mantenerlo con las medidas higiénicas adecuadas, no se puede utilizar en queserías modernas, solamente en casos de exhibiciones de hacer queso de forma tradicional y para demostraciones puntuales. En algunos restaurantes utilizaban hasta hace poco pequeños kaikus de madera para servir la mamia o cuajada, pero como la gente se los llevaba, lo dejaron de utilizar, porque era difícil de conseguir más.El futuro para el kaiku de madera es en sí como el momento actual; el mundo ha evolucionado, y se conserva la forma pero no el material, por eso se han fabricado en plástico, metal y cerámica.
Mientras quede algún artesano que sepa hacerlos en madera, podrá ser un artículo de regalo estrechamente vinculado con la antigua tradición de Euskal Herria, y sería una pena que se llegara a perder el kaiku de madera, pues es un material noble y muy propio de la tierra.